Con una la colocación óptima de los amortiguadores, correctamente posicionados entre ellos y lejos de fuentes de calor, BMA consigue la marcha especialmente estable de una centrífuga K3300F. De este modo no sólo se reduce la carga de vibraciones de los componentes individuales, sino que se prolonga en conjunto la vida útil de la centrífuga. Además, con esta centrífuga de la serie K también contribuimos a reducir el nivel de ruidos en la producción y a proteger a los operarios de la contaminación acústica en el lugar de trabajo.