El principio de funcionamiento de los difusores de BMA es sencillo y su construcción robusta. Al incorporar una pequeña proporción de componentes complejos, son posibles altas cuotas de fabricación locales. La utilización de menos componentes móviles reduce el desgaste. Además, se utilizan mayoritariamente módulos estandarizados. Esto supone un ahorro de los costes y conduce a resultados tecnológicos excepcionales. El proceso de difusión, sencillo al tiempo que fiable, permite, en combinación con un alto grado de automatización, un funcionamiento de las instalaciones con menos personal, especialmente en comparación con los molinos de caña.